Lo destacó Malcom Wilson, presionado desde todos lados luego de la catastrofe deportiva que significó la apertura de la temporada de asfalto en Bulgaria, donde Citroen acentuó su dominio y enfrenta la alternativa de la decisión de su piloto, hoy con un futuro trascendente dentro de la categoría."Queremos ganar el Mundial de Constructores del año próximo y para ello, pondremos 3 autos oficiales con Mikko Hirvonen, Jari Matti Latvala y esperamos...con Sebastien Ogier.En los próximos días tendremos una respuesta por parte del francés y somos optimistas al respecto. Desde el MSport estamos absolutamente listos para atender a los tres pilotos y ponerlos en condiciones de dominar el certamen, porque los resultados alcanzados por el Ford Fiesta 1.6 turbo, han col mado nuestras expectativas y con él, lucharemos por ser los mejores”.Mientras tanto, en la sede de Citroen, si bien no hay referencias al tema, la intranquilidad y los nervios dominan la escena, ante la posibilidad que su piloto estrella (junto a Loeb) imponga condiciones económicas que superen la reconocida modalidad ahorrativa que es norma del equipo frances.
En los próximos días sabremos que final Ogier, le pone a su novela.
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